Debido a cómo ha ido evolucionando nuestra sociedad, cada vez somos más sedentários. Incluso en nuestros puestos de trabajo. Por esta razón muchos de nuestros pacientes refieren dolor en la zona cervical.
Los síntomas más frecuentes que presentan son: tensión en la zona de la nuca, hombros cargados o incluso hormigueo en las manos.
Con esto no quiero decir que todas las cervicalgias vengan producidas por una mala postura en el trabajo, pero si que puede tener un papel importante a la hora de perpetuar esta condición dolorosa.
A nivel osteopático, nuestro trabajo será descubrir que es lo que esta provocando el dolor, y a partir de ahí empezar a trabajar con nuestro paciente para devolver la flexibilidad a la zona afecta. Con el objetivo de restaurar la capacidad de trabajo de en este caso, las cervicales.
Las técnicas que utilizamos son específicas para cada paciente, ya que es necesario tener en cuenta las diferentes patologías que pueden acompañar a esta clínica.
Iñaki Díez.
Fisioterapeuta y Osteopata D.O.
Si quieres leer más sobre la cervicalgia en la oficina haz click aquí.